No necesito corona...

La princesa sin corona

Princesa, ¿porqué no lleva usted corona?

Érase una vez, hace mucho tiempo, una princesa llamada Bella. Bella vivía en un castillo muy grande y lujoso. Tenía muchos sirvientes a su disposición y un pueblo entero de fieles. Pero Bella no era feliz.

Bella miraba a través de la ventana de su torre día y noche. Su padre, el rey, Federico estaba muy preocupado por ella. Hacia todo lo posible por contentarla. Contrataba espectáculos, la llevaba a teatros y acudían a recitales. Aún así Bella seguía sin sonreír.

Desesperado el rey Federico llamó a su hermana, la princesa Lucrecia, para que le ayudara con su hija. Lucrecia llegó al palacios de Bella, con todo su ajuar de princesa, menos su corona. La gente se extrañó, pero, nadie se atrevía a preguntarle porqué no llevaba corona.

Cuando la princesa Lucrecia entró en palacio, un niño se le acercó y le preguntó:

-Princesa, ¿porqué no lleva usted corona?

-Porque la felicidad, pequeño, la consigues tú, no ninguna joya.

 CAZADORA DE SUEÑOS